El empleo de baterías misilísticas costeras móviles y su contribución como parte de una estrategia A2 - AD en el Atlántico Sur.

Abstract

En la actualidad, la Nación Argentina debe ejercer control en su mar territorial, zona económica exclusiva, y, si tiene intereses, en el continente más austral del mundo. Para ello, la Armada Argentina debe extender su influencia en el mar con buques o unidades basadas en tierra, en islas, penínsulas y salientes para controlar la porción de mar pretendido en el cono sur. Los lineamientos de la Directiva de Defensa 2021 expresan de manera explícita la naturaleza de las Fuerzas Armadas argentinas, las cuales deben ser de carácter defensivo y no expansionistas sobre terceras naciones. Por ello, este trabajo analiza las capacidades del empleo de baterías misilísticas costeras móviles en el marco de la defensa argentina. Una armada –concebida para ejecutar operaciones de carácter ofensivo, como las operaciones anfibias del tipo principal y secundario– debe incorporar (dentro de la actitud nacional estratégica defensiva) la capacidad de negar áreas de interés marítimo bajo el concepto de A2-AD. Una de las herramientas para hacerlo es integrando baterías de misiles móviles costeras para reforzar sus sistemas de defensa de costas. La doctrina vigente será compatible con este concepto, siempre que se readapten los medios existentes y su empleo en el cono sur. Asimismo, Argentina desde que finalizó la guerra de Malvinas hace 40 años, produce, modifica y evalúa su doctrina conjunta y el empleo integrado del instrumento militar. Es por ello que debe destacarse y diferenciarse el empleo del tipo de arma que se propone (baterías de misiles costeras), ya que tendrán por un lado como blanco normalizado a unidades de superficie navales, y por otro que el arma puede ser operada por el Ejército Argentino o la Infantería de Marina, que serán a su vez apoyados en transporte aéreo por Fuerza Aérea, o transporte por mar con buques de la Armada.